Los cactus son plantas que se caracterizan por sus espinas y su adaptación a climas áridos. Son parte de la familia de las cactáceas, que cuenta con más de 2,000 especies diferentes. Estas plantas se encuentran principalmente en regiones desérticas y semiáridas de América, pero también pueden ser encontradas en otras partes del mundo.
La forma de los cactus varía ampliamente, desde los pequeños y esféricos hasta los altos y columnares. Al no tener hojas, su principal adaptación es la presencia de espinas en lugar de hojas, que les permite reducir la pérdida de agua a través de la transpiración.
Además de su capacidad para sobrevivir en climas áridos, los cactus tienen otras características sorprendentes. Algunas especies pueden sobrevivir largos períodos de sequía y luego revivir rápidamente cuando reciben agua. También son resistentes a temperaturas extremas, tanto altas como bajas.
Los cactus también son conocidos por sus flores coloridas, que pueden ser de diferentes tamaños y formas. Algunas especies incluso producen frutos comestibles, como el tuno o la pitaya.
Por su singularidad y belleza, los cactus son muy populares como plantas decorativas en jardines y hogares, y también son objeto de estudio en el campo de la botánica.
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