Malversar, también conocido como invertir ilícitamente caudales ajenos, es una práctica criminal en la cual una persona utiliza fondos o recursos que no le pertenecen para su propio beneficio. Esta actividad ilegal implica desviar dinero o bienes que están bajo la responsabilidad de otra persona o entidad, y utilizarlos de manera indebida sin autorización.
La malversación de fondos puede tener consecuencias graves tanto para la persona que comete este delito como para la sociedad en general. El responsable de malversar puede enfrentar cargos criminales y penas de cárcel, además de ser obligado a devolver el dinero o bienes desviados.
El malversador busca ocultar sus acciones, manipulando registros contables o utilizando métodos fraudulentos para encubrir sus actividades ilegales. Este delito puede afectar a cualquier tipo de organización, desde empresas privadas hasta entidades gubernamentales.
Es importante destacar que la malversación de fondos puede generar un impacto negativo en la economía, ya que los recursos desviados dejan de destinarse a su finalidad legítima. Además, socava la confianza y la reputación de las instituciones involucradas.
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